Estoy tranquilamente pasando la mañana en mi cabaña. Me comunico con Isabel que me cuenta que tiene un viaje programado para Amsterdam para mediados de abril del año que viene. Mi vecino es holandés y, hablando con él, había ido pensando últimamente en preparar un viaje a Holanda. Decido ir a encontrarme con Isabel allá. […]
Yo no controlo lo vida. El ánimo sube y baja. Descubrir es guay. Mi mente es de Dios. Necesito hacer un reset. Las tinieblas. Aprender constantemente y saber que no sabes nada. Por eso es necesario jugar, vivir jugando y no tomarse nada en serio. Recoger para poder volver a ensuciar y mientras extraer algo
Me encanta relacionarme con mi cuerpo. Me encanta hacer reír. Me gustaría contar historias. No hay límite para soñar. Ahora estoy soñando. Seamos sencillos, vamos al grano, vamos a encontrar qué es lo que le va a dar sentido a mi vida.
01:00 h. Noche cerrada. Ayer me acosté como a las 20:30 h así que ya no tengo sueño y unos mosquitos me están picando en los dedos y me obligan a activarme. ¿Qué hago? Es una hora intempestiva, no tengo mucha luz en mis dispositivos electrónicos así que no puedo hacer trabajo intelectual pero es
Estos días de mediados de septiembre empiezo a plantearme una manera diferente de dejar de fumar, al menos de reducir la cantidad de cigarros. Me hago con unos gramos de gordolobo, una hierba que he leído en algún lado que puede fumarse y que, combinada con tabaco, hace que el contenido de este último ingrediente
∞ Sueño ∞ Se me aparece mi tía Mari Carmen. Parece que va a contarme algo que necesito saber, algo oscuro. Quizás se trate del abuso a un niño. Me despierto debido al profundo miedo que me entra en el sueño y al final mi tía Marti Carmen no me dice lo que iba a
En el huerto con unos amigos comiendo y cantando. Sale en la conversación el tema de los aceites esenciales porque Merche tiene un alambique. Hablamos también de unos cursos de aromaterapia del que tengo un folleto informativo guardado en una carpeta en la cabaña y que tengo ganas de hacer.
∞ Sueño ∞ Aceites esenciales en una tienda. Los huelo, los disfruto. Aparece un hombre, el hijo de la herboristera. Abrazo intenso, conexión. Me dice que me dedique a los perfumes, a la sensibilidad. Enseguida aparece una mujer con una carpeta blanca que pone «salud». Tengo que rellenar una ficha. Luego viene más gente y
