Algo ha pasado mientras hablaba con Josep por la mañana en la cocina, se ha movido un clic en mi cerebro. Estábamos hablando de Vicente, de que se ha vuelto a dormir esta mañana para ir al trabajo. Le digo que yo hago campaña anti-trabajo. Me dice: «Tu no trabajas porque no te gusta tu trabajo.» Entonces me he dado cuenta de que sí que me gusta mi trabajo, de que no es que no me guste trabajar. Mientras hablaba con él buscaba razones por las que no trabajo y por lo tanto no gano dinero y decía: no me gusta trabajar para otros, no me gustan los horarios, la rutina… Mientras hablaba, me daba cuenta de que estas razones son inconsistentes. Aunque sí que son ciertas, con lo que sé, me lo puedo montar para trabajar sin pasar por esto.
Así que hay una razón de fondo, que es la verdadera razón y es que no quiero ganar dinero. En mi interior está arraigada alguna idea que me hace no querer ganar dinero, porque no le doy valor. Creo que una buena manera de cambiar esta situación, es empezar a ver el dinero como algo que me va a dar la posibilidad de hacer realidad mi vida tal como quiero que sea.
