2016.06.25

Hoy es el segundo día que está el comedor lleno de gente en silencio. La gente ya está metida en el papel que, en realidad es menos papel que el de estar todo el rato hablando, aunque lo del silencio sigue siendo un papel. Porque al fin y al cabo, todo el mundo sabe ya como funciona el desayuno y todo el mundo se conoce aunque sea de vista, así que ahora empieza a salir un yo más verdadero de la gente, más en sintonía con los verdaderos sentimientos e inclinaciones personales, menos polite, menos bobaliconamente sonriente.

Parece que se me está yendo el eccema. ¿Estabilidad, hogar?

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